Probióticos, prebióticos y postbióticos en cosmética

Las bacterias también cuidan tu piel  

El mundo del microbioma es fascinante, es allí donde entran en juego los probióticos y prebióticos. En los últimos años se han descubierto centenas de funciones en que está implicada nuestra flora intestinal, compuesta por bacterias, hongos y otros microorganismos que viven en perfecta simbiosis en nuestro interior (cuando está equilibrada) para ayudarnos a digerir, producir vitaminas o deshacernos de tóxicos correctamente entre otras funciones.  

Pues en nuestra piel también se desarrolla todo un micromundo parecido: la flora cutánea, con bacterias beneficiosas que nos ayudan a mantener la función barrera de la piel, que nos protege de la deshidratación, de infecciones e inflamaciones. El mundo de la cosmética biotecnológica está muy activo investigando en este campo para encontrar nuevos ingredientes que refuercen esta función, y los prebiótios y postbióticos son una de las claves. 

Te presentamos los nuevos activos para una piel sana y bonita que tienes que conocer, muy especialmente si tienes la piel sensible o la sientes desequilibrada (deshidratada, con reacciones alérgicas, irritación, brotes de rosácea…). Nosotros ya los tenemos fichados en algunos sérums, como siempre junto con otros activos que actuarán en sinergia. ¡Te lo contamos todo!  

La flora de la piel  

La microbiota o flora cutánea es la comunidad de microorganismos que viven en nuestra piel (bacterias, hongos, ácaros,etc.). Esto puede resultar un poco incómodo de saber al principio (¿los ácaros viven en mi piel?), pero la realidad es que este ecosistema habita en nuestra piel desde que nacemos (la colonización microbiana se inicia en el parto) y tiene como objetivo proteger tu piel, protegerte a ti.  

La microbiota de la piel es diferente según el lugar donde vivimos, la temperatura, la edad… ¡y cambia también según la zona del cuerpo! La naturaleza es sabia y sabe qué necesitamos en cada momento y lugar.  

En condiciones normales, la flora cutánea se mantiene en equilibrio y no es responsable de infecciones ni daña el tejido, al contrario, participa de forma activa en la función barrera, que es la barrera física (nos protege del frío, deshidratación…) e inmunológica (nos defiende de bacterias y factores patógenos). En cambio, si este delicado equilibrio se rompe por alguna razón (estrés, cambios hormonales, problemas en la flora intestinal…) la barrera cutánea se altera y no protege adecuadamente. Entonces nos encontramos la posibilidad que aparezcan diferentes afecciones como la deshidratación, acné, afecciones como la rosácea… Una piel sensible, suele tener una mala función barrera de forma “cronificada”.  

Probióticos, prebióticos y postbióticos para la piel  

Antes de nada vamos a ver la diferencia entre ellos:  

Probióticos

Un probiótico es cualquier bacteria (viva) que ayuda a mantener la salud del cuerpo. Los probióticos orales nos ayudan a recuperar o mantener una flora intestinal sana, pero en cambio los probióticos en cosmética todavía son un reto para la industria, ya que no es posible mantener estas bacterias vivas en un cosmético evitando su contaminación (que el producto se mantenga en buenas condiciones y sea seguro). Por eso actualmente en la Unión Europea no se permite incluir bacterias vivas en productos para el cuidado de la piel. Por tanto se utilizan partes de ellas, lo que llamamos lisado y entonces cambian de nombre a post-bióticos. 

Prebióticos

Es cualquier sustancia que alimenta y fomenta el crecimiento de los probióticos (bacterias buenas). Aquí sí, en el caso de la piel, podemos encontrar muchos activos para dar de comer a nuestras bacterias amigas, mejorando la inmunidad de la piel y manteniendo a raya las bacterias “malas”. Es decir, una piel más sana, equilibrada y resistente. Entre ellos están los fructooligosacáridos y fibras insolubles. 

Postbióticos

Los postbióticos son un término científico muy nuevo. Se trata de las sustancias que producen los probióticos con una acción beneficiosa para nosotros. Enzimas, proteínas, lípidos, azúcares que provienen de procesos como la fermentación y que tienen un efecto en nuestra inmunidad o metabolismo.  

Los postbióticos en cosmética son un terreno muy nuevo, pero ya  hay estudios que demuestran cómo pueden ayudar a equilibrar la piel y mantener su función barrera.  

También son postbióticos los lisados de bacterias, que son bacterias muertas o partes de ella y que activan nuestro sistema inmunitario 

Como ves, una correcta función barrera es esencial para tener una piel sana, y la flora cutánea es clave en ello. Los prebióticos bióticos y los postbióticos son activos que nos ayudan a recuperar y mantener el equilibrio de esta flora y así tener una piel saludable.  

Los pre y postbióticos en tu rutina facial 

La línea Blue Balance es ideal para pieles normales, mixtas, grasas y sensibles 

Blue Balance es un sérum multiacción con una fórmula única que rehidrata la piel y le devuelve a la piel su equilibrio natural. Y para ello contamos con una combinación de prebióticos y postbióticos que refuerzan la función barrera:  

•Prébióticos: contiene un complejo de oligosacáridos y disacáridos (fructosa, sucrosa, glucosa), aminoácidos (ácido glutámico, alanina) y dextrina que incentiva el crecimiento de los probióticos naturalmente presentes en la piel.  

•Postbióticos: se trata de un lisado (probiótico inactivo) de una bifidobacteria procedente de biotecnología marina.  

Ambos actúan en sinergia equilibrando la flora y la barrera cutánea. La piel mejora la hidratación, así como sus capacidades defensivas y de regeneración. Se vuelve más resistente frente a patógenos y se defiende mejor de las radiaciones UV.  

Junto con estos activos encontramos la niacinamida, activo multifunción seborregulador, calmante y antioxidante y la spirulina, que oxigena y revitaliza la piel, por lo que es ideal para reequilibrar pieles mixtas, grasas, acneicas y sensibles como sérum diario.  

Si tienes la piel mixta o grasa y buscas un plus seborregulador, añade el nuevo gel Blue Balance. Piel hidratada, sana, libre de brillos e imperfecciones.   

Sérum Glicano Skin 

Pieles normales a secas 

Glicano Skin es un sérum que actúa como recuperador intensivo cuando la función barrera está debilitada, pero en este caso nos da principalmente una piel deshidratada, desvitalizada y con arrugas. Es un tratamiento ideal para tratar pieles fotoenvejecidas después del verano, o como sérum básico para pieles secas o maduras como en la menopausia, cuando la piel se vuelve más fina y empeora su sistema inmune.  

Glicano Skin contiene B-Glucan Complex, un complejo de prebióticos obtenidos por biotecnología (levaduras), que activan el sistema inmune de la piel, a la vez que rehidratan, suavizan y calman la piel.  

Junto con el ácido hialurónico, las isoflavonas de soja y el el aloe vera, la piel mejora su jugosidad, elasticidad y tersura.  

Los pro, pre y postbióticos han llegado a la cosmética para mejorar las capacidades naturales de tu piel. ¡Úsalos!