La importancia de la vitamina D en la piel

La luz solar ayuda a que nuestra piel esté sana y produzca una vitamina esencial: la vitamina D3 (que se sintetiza tras la exposición a la luz solar).  

Esta vitamina es necesaria para que el organismo absorba el calcio, y este se fije en los huesos. Pero en los últimos años, varios estudios han demostrado que los niveles de vitamina D en la población han disminuido drásticamente, y alrededor de un 50-70% tiene deficiencia de vitamina D, incluso en países soleados como España.  

¿A qué se debe la disminución de Vitamina D? 

Entre los principales factores que destacan podemos encontrar el estilo de vida moderno (trabajamos en interiores, como la casa u oficina), las dietas no adecuadas y el uso excesivo de cremas de protección solar.  

Los niveles de vitamina D también disminuyen por procesos que están relacionados con la edad. Un 60% de las personas de entre 50 y 60 años tiene déficit de esta vitamina, aumentando la cifra hasta llegar al 80% en mayores de 65 años.  

No solo nuestro organismo reduce su síntesis, sino que también disminuyen sus receptores específicos en la piel. Y debido a la falta de esta vitamina, nuestra piel puede presentar varios síntomas: 

▪️ La función barrera se ve desestructurada 
▪️ La piel se vuelve más frágil.  
▪️ Deshidratación. 
▪️ Poros más dilatados. 
▪️ Falta de elasticidad. 
▪️ Aparecen arrugas. 

 

La vitamina D3 tiene más de una función fundamental en la piel 

✔️ Refuerza la barrera cutánea y la capacidad de recuperación se acelera. 
✔️ Mejora la resistencia de la piel frente agresiones externas como radiación UV y la deshidratación. 
✔️ Regula la diferenciación de queratinocitos. 
✔️ Mejora las funciones mecánicas de la piel (elasticidad). 
✔️ Reduce la irritación de la piel. 
✔️ Juega un papel importante a nivel inmunológico y reduce procesos de inflamación que causan envejecimiento y/o patologías como la psoriasis, acné o dermatitis. 

 

El déficit de vitamina D no sólo influye en la piel. En los huesos, su falta facilita la aparición de osteoporosis (sobre todo en mujeres a partir de la menopausia), sino que hace al organismo más propenso a sufrir otras enfermedades:  

1. Las personas con niveles bajos de vitamina D tienen mayor probabilidad de padecer un infarto, ictus o angina de pecho. 
2. La vitamina D participa en la activación de la serotonina a partir del triptófano, por lo que su falta se puede manifestar con astenia, cansancio, depresión, fatiga muscular, ansiedad, etc. 
3. Tiene una gran relación con el sistema inmune por lo que unos niveles bajos de vitamina D pueden debilitar la respuesta inmune. De hecho, la falta de esta vitamina D se ha relacionado con casos de covid-19, ya que los pacientes con niveles bajos de vitamina D tenían menor capacidad de defensa frente a cualquier microorganismo. 

Claves para mantener niveles sanos de Vitamina D en tu piel 

Una dieta equilibrada 

Para prevenir la carencia de vitamina D es importante consumir más pescados grasos (como el atún y el salmón). La yema de huevo también es rica en Vitamina D. 

 

Tomar un poco de Sol (sin protección) 

Para sintetizar la Vitamina D, nuestra piel necesita la acción directa de la radiación solar (sobre todo los rayos UVB). Los dermatólogos, que siempre recuerdan la necesidad de protegerse de la acción del Sol, recomiendan una exposición de 10-15 minutos diarios sin protección, y en aproximadamente una zona de un 25% de la piel (como por ejemplo brazos o piernas). 

Y es que la luz solar es imprescindible para que se produzca el proceso fotoquímico de la síntesis de vitamina D3. Las radiaciones UV participan en el paso del 7-dehidroxicolesterol en la epidermis a vitamina D3 que es la que pasa al torrente sanguíneo en su forma activa. 

 

Incluir activadores de Vitamina D en tu rutina 

Nuestro Solar Spray Body & Hair esta formulado con un “activador de la vitamina D”. Se trata de una sustancia que activa a los queratinocitos para que se sinteticen la vitamina D3 tras la exposición solar.  

Este activo también mejora la función barrera y aumenta la resistencia de la piel frente a la radiación UV, evitando el eritema y la inflamación. 

El resultado es una piel protegida del envejecimiento prematuro, pero nutrida con Vitamina D. 

 

Spray Solar Corporal Hair & Body

 

Mantener un equilibrio 

Si bien es cierto que algunos minutos de exposición diaria al Sol son sanos para la piel, también es importante mantenerla protegida en las horas críticas del día, cuando los rayos ultravioletas son más fuertes. 

Mantener un equilibrio entre la exposición que recibimos del Sol, y el tipo de protección solar que usamos es la clave para que nuestra piel se mantenga sana por mucho tiempo. 

Si buscas más consejos, echa un vistazo a nuestro artículo sobre cómo escoger un protector solar. 

 

Pack Solar: Facial y Corporal