abril 27 2022 – Yvonne Briones
¿De qué manera algunos seres y plantas sobrevive a condiciones ambientales extremas? Durante los años la naturaleza no solo permanece, sino que florece contra la adversidad.
¿No sería maravilloso poder hacer algo parecido para prolongar la salud de nuestra piel?
Existen organismos que durante milenios han demostrado su eficacia para sobrevivir a medios extremos fabricando ingredientes que los han hecho mucho más resistentes. Y actualmente, gracias a la biotecnología, podemos extraer estos activos y aplicarlos en nuestra piel para aprovechar todos sus beneficios.
Incluir activos biotecnológicos en tu rutina facial te permitirá contar con ingredientes apto para todo tipo de pieles, y te garantizan efectos más profundos. Además, son completamente naturales y realmente eco-sostenibles.
¿El secreto? En estos procesos biotecnológicos de obtención de nuevos ingredientes activos no se requieren grandes extensiones de suelo cultivable, ni de consumo de agua, son libres de pesticidas y herbicidas y reducen significativamente la huella de carbono.
En Segle Clinical la biotecnología es nuestra aliada, y nos permite imaginar, crear y desarrollar nuevos productos más eficaces.
Un legado de la humanidad
Aunque la definición de “biotecnología” pueda parecer compleja, lo cierto es que ya es algo muy integrado en nuestras vidas. De hecho, las civilizaciones antiguas la utilizaban en el día a día:
✔️ El queso (que puede considerarse el primer producto biotecnológico) se obtuvo agregando cuajo (una enzima) a la leche agría.✔️ Los maestros cerveceros de Babilonia las utilizaban para elaborar cerveza.
✔️ En el vino se elabora a través de proceso de fermentación de determinadas bacterias.
✔️ Los aztecas utilizaban el alga Spirulina para elaborar pasteles.
✔️ Cleopatra descubrió las ventajas de los alfa-hidroxiácidos al incluir en su rutina de belleza los baños en leche de burra.
¿De dónde provienen nuestros ingredientes biotecnológicos?
La cosmética es uno de los campos con mayor innovación a nivel biotecnológico en la actualidad. En Segle Clinical usamos ingredientes extraídos de las plantas (biotecnología verde) y del mar (biotecnología azul) en las fórmulas de nuestros productos.
Vital C: línea con Vitamina C antioxidante, antiestrés e hidratante.
En la formulación de Vital C hemos incluido Chlorella emersonii, una microalga verde milenaria que proviene de los lagos helados de los Pirineos donde sufre estrés por bajas temperaturas y casi ausencia de luz. Esta alga produce una serie de activos antioxidantes con una gran capacidad para eliminar radicales libres, que son los promotores del envejecimiento prematuro de la piel. A partir de biotecnología azul conseguimos que estos ingredientes formen parte de nuestra línea Vital C por su efecto anti-estrés.
Blue Balance: línea con protección de la luz azul, seboreguladora
En la línea Blue Balance podemos encontrar Spirulina maxima, un alga proveniente de África con un alto contenido de nutrientes y fitoactivos. Esta alga sintetiza -entre otros- pigmentos ficocianinas y enzimas fotoliasas para defenderse y sobrevivir a factores externos poco favorables. Gracias a la biotecnología azul podemos aislar estos activos (que podemos considerar como filtros biológicos) y utilizarlos en nuestra línea Blue Balance para prevenir de los efectos nocivos de la luz azul y estimular la función barrera de la piel de manera natural.
Espuma Antipolución: limpiador suave para todo tipo de piel
En el ecosistema de Kopara de la Polinesia Francesa encontramos a las Alteromonas macleodii que producen exo-polisacáridos que actúan como un film o escudo protector del estrés ambiental y de las condiciones de vida extremas en las que viven (como radiaciones UV, cambios de pH o salinidad).
Utilizando procesos de biotecnología azul sostenibles, se obtiene el Activo Antipolución PM 2.5 que incluimos en la fórmula de nuestra Espuma Limpiadora. El activo antipolución ayuda a evitar que las partículas de contaminación más pequeñas atraviesen la piel.
Sérum Tinolvital: tratamiento transformador antiedad de noche
Una de las aplicaciones más interesantes de la biotecnología blanca son los procesos biomiméticos, que permiten obtener ingredientes idénticos a los que elabora nuestro organismo de una forma nueva, más eficiente y completamente natural. A través de la biotecnología, podemos producir moléculas como el ácido hialurónico idéntico al producido por las células de la piel.
En el caso de Saccharomices cerevisiae a partir de sustratos derivados de plantas como la soja y la levadura de cerveza, es capaz de sintetizar los péptidos o proteínas que utilizamos en los sérums Tinolvital o Glicano Skin que alargan la longevidad de las células de la piel y por consiguiente previenen el envejecimiento prematuro de ésta.
Skin Factor: fórmula regeneradora para todo tipo de piel
La Nicotiana Benthaniama crece en suelos pobres y colinas rocosas de la zona más agreste de Australia. Gracias a la biotecnología verde, podemos utilizar esta planta como biofábrica para producir moléculas de interés cosmético y farmacéutico como los factores de crecimiento, unas proteínas que aceleran los procesos naturales de cicatrización o curación de heridas y regeneración de la piel. Aprovechamos en la gama Skin Factor, el poder renovador de los factores de crecimiento para regenerar pieles agredidas, irritadas o sensibles y para mejorar la textura, suavizar arrugas de expresión de la piel.
Etiquetado: activos, biotecnolgía, blog_filter_Biotecnología, rutina facial
0 comentarios